La arena con que se
construyeron las aceras del nuevo parque, de Caraballo (el actual), era de
playa; es decir que ecológicamente hablando estaban dejando "pelada"
un área de la costa de no sé dónde....
"Coco están
desvistiendo un santo para vestir a otro" como diría mi madrina Eloisa. Los
camiones de arena mojada aun, los volteaban en la calle lateral frente a la
casa de Emiliano Xenes, EL GAGO. Lomas enormes de arena de mar gruesa oliendo a
salitre con caracoles multicolores, conchas nacaradas en bisagra como alas de mariposa,
restos de arbóreos y urticantes corales, acintadas, verdes algas marinas,
brillosos cobos rosados habitados aun de carne blanca y cangrejillas
agonizantes....
Costa portátil, transitoria que tuvimos esos días y brisa marina,.. a
veces un poco fuerte,... a marisco putrefacto, que combinado, con los vapores
de la letrina colectiva que excavaron para uso de los trabajadores justo frente
a la puerta delantera de la Iglesia, daban un clásico toque de mar y
"tierra".
Los olores ya se fueron hace tiempo, quedan si nos fijamos en las aceras
del parque mezclados con el cemento cascarillas de caracoles que brillan al
medio día, Con parte de las conchas recolectadas, los hijos de Mariantonia
Trasancos decoraron una pequeña urna de cemento que aún está en pie en esa misma
calle, al lado de su casa, yo la vi hacer, con cemento del parque, era quizá un
gesto de rebeldía por bloquear la entrada de la iglesia, no estoy seguro….. de
lo que si estoy seguro es que las dos palmas a ambos lados y el césped de los
alrededores de la entrada son más vigorosos y verdes hoy, porque aunque ya está
tapada por el cemento........... hubo mucha mierda ahí,, yo la vi,,,,,.
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