Autor: Andrés González
El
hielo llegaba a Caraballo en camión desde Jaruco los domingos
temprano, los que no teníamos refrigerador lo vigilábamos y le caíamos atrás por todo el pueblo para comprarlo frescamente cortado con
hachas ante nuestros ojos, salpicas de agua helada y hielo incluidas
cuando fracturaban los bloques grandes ("PIEDRA DE HIELO")
cristalinos y con vetas blancas. Corríamos con el, a mano limpia,
goteando por la acera y con los dedos adoloridos del frio lo envolvíamos como a un recién nacido hipotérmico, en papel de periódico,
en sacos lo llevábamos al lugar mas escondido de la casa y lo conservábamos como un cavernícola debió hacer con el fuego en la Edad
de Piedra , con los 7 centavos que costaba el bloque de mas o menos
la dimensión de dos ladrillos de largo y unas pulgaditas mas de ancho
y alto nos lo auto administrábamos hasta que se extinguía a media
semana, para una limonada o para apaciguar un flemon o un dolor de
muelas..... Ciertamente había refrigeradores en muchas casas del pueblo
y en las fincas los colonos tenían en sus casas unos que funcionaban
con kerosen o luz brillante, en los cincuentas refrescarse era fácil según recuerdo, en cada esquina una bodega con su refrigerador y en la
Calle Real los bares, variedad de refrescos y cervezas batidos con
nombres Materva, Salutaris Ironbell,Orange después ya se sabe.....
refresco blanco y prieto déjame salirme de ese tema
racista.... Voy a recordar a tres caraballenses que nos ayudaron a
tener el esófago fresco cuando mas lo necesitábamos, quien no se tomo
un granizado raspado por Miguel Viciedo el Patero, camiseta blanca
sombrero de guano hirsuto, que llego con su carro su piedra de hielo cóncava ya y sus dos filas de botellas con collares de abejas nos
espero en la palma del Centro Escolar rayando y poniendo el hielo en
los cucuruchos blancos que después de tu elección y cinco centavos
te los pintaba de rojo fresa, amarillo mantecado, verde menta, o
blanco anís o arcoiris todos juntos.... Luis Lago de voz dulce y pastosa como el helado de sus vasitos y paletas también con carrito y
campana como Miguel pero con hielo seco....Genobeba los Batidos mas
recordados de Caraballo, mamey espeso por una peseta punzada del guajiro
asegurada ....... Una frase celebre para terminar .... Un hijo de
Andango se ha comprado una piedra de hielo y la esta rompiendo con
un martillo música mejicana, cerveza lista para enfriar de pronto un
alarido y no mariachi sino de dolor, casi llanto, salta en un pie y se
sostiene el dedo gordo de la mano ,"QUE TE PASO" ? le pregunta Blanca
ex de Rolando la Cancha ahora su mujer el exclama adolorido "ME
MACHUQUE UN DEDOOO. AY AY AY!!!!!" ella despreciativamente le dice
AVEMARIA CHICO PEOR ES PARIR" la uso mucho, otra que me va bien es que
me paso como la harina de Julian Travieso sino miren la foto.
sábado, 27 de septiembre de 2014
viernes, 12 de septiembre de 2014
La baranda de la vida
Autor: Andrés González
Para ir para el patio y no caerme con el hielo que viene me voy a hacer una baranda tejida con gajos secos que estoy recolectando de las cunetas, frente a la mirada recelosa de algunos rubios vecinos que no me conocen y bajo la protesta cercana de alguien que me conoce y me recuerda que mis "terminados" tienen la influencia genética de mi tío Oscar Amores (casa laberinto y bóveda del cementerio inclinada) y de Felix Lima (mi primer y querido caraballense vecino del frente, hábil edifidador de paredes de bloques ondulantes), no me interesa ...me entretiene hacerlas me siento un escultor..., los gajos se tocan en alguna parte y ahí mismo a amarrar cabezas y se va armando la baranda no necesito plomada ni cinta métrica nada de Home Depot, las cosas se arman a veces solas sino fíjense en la secuencia de las fotos: A mi me trajo mi madre a Caraballo crecí en esa casita con Eloisa si se fijan en el portal nada mas distante de la horizontalidad, a mi derecha la casa de Odalina y Ronaldo Artiles delante de nosotros Felix con sus paredes, crezcó mas, doblo la esquina de Tano Ibarra, (no seguí recto como un liston 2x4), me encuentro en un banco del parque con la misma que me critica las curvas de mi baranda y ella llena de ellas, me mudo para la casa de Manolo Revilla y vivo con su mama como si fuera la mía, uso su juego de cuarto cuya cabecera da directamente a la cabecera de Nina Abreu ex de Felix Lima, pared de tablas recta pero sin insulación y finitaaaa, puedo oír a su esposo actual 4.45 a.m., Severo el Largo del Pino cuando preocupado tose garraspea y me dice "Andresitooo sonó el despertador" en plena luna de miel, hicimos después enroque de sala y cuarto, mas tranquilos salio Samira, y Migue la cuido de sus amiguitos descamisados, todo en menos de dos cuadras con el angulo de 90 grados que hace la casa de Tano pero que fue después de Lula , en esa foto creo sale Roberto Fontan "el duende" al que reencontramos en esta pagina lo mismo que a Rey Artiles ahí encontré esa foto de sus viejos visitándome en los platanales de Ciego donde me mandaron por no ir a Angola o mejor dicho por pedir esperar hasta el nacimiento de Samira ....... gajo a gajo cabeza con cabeza va uno formando la baranda de la vida que no es nada recta, da giros, vueltas, lo importante es buscarle el angulo natural a lo que te vas encontrando y no caerte.
Para ir para el patio y no caerme con el hielo que viene me voy a hacer una baranda tejida con gajos secos que estoy recolectando de las cunetas, frente a la mirada recelosa de algunos rubios vecinos que no me conocen y bajo la protesta cercana de alguien que me conoce y me recuerda que mis "terminados" tienen la influencia genética de mi tío Oscar Amores (casa laberinto y bóveda del cementerio inclinada) y de Felix Lima (mi primer y querido caraballense vecino del frente, hábil edifidador de paredes de bloques ondulantes), no me interesa ...me entretiene hacerlas me siento un escultor..., los gajos se tocan en alguna parte y ahí mismo a amarrar cabezas y se va armando la baranda no necesito plomada ni cinta métrica nada de Home Depot, las cosas se arman a veces solas sino fíjense en la secuencia de las fotos: A mi me trajo mi madre a Caraballo crecí en esa casita con Eloisa si se fijan en el portal nada mas distante de la horizontalidad, a mi derecha la casa de Odalina y Ronaldo Artiles delante de nosotros Felix con sus paredes, crezcó mas, doblo la esquina de Tano Ibarra, (no seguí recto como un liston 2x4), me encuentro en un banco del parque con la misma que me critica las curvas de mi baranda y ella llena de ellas, me mudo para la casa de Manolo Revilla y vivo con su mama como si fuera la mía, uso su juego de cuarto cuya cabecera da directamente a la cabecera de Nina Abreu ex de Felix Lima, pared de tablas recta pero sin insulación y finitaaaa, puedo oír a su esposo actual 4.45 a.m., Severo el Largo del Pino cuando preocupado tose garraspea y me dice "Andresitooo sonó el despertador" en plena luna de miel, hicimos después enroque de sala y cuarto, mas tranquilos salio Samira, y Migue la cuido de sus amiguitos descamisados, todo en menos de dos cuadras con el angulo de 90 grados que hace la casa de Tano pero que fue después de Lula , en esa foto creo sale Roberto Fontan "el duende" al que reencontramos en esta pagina lo mismo que a Rey Artiles ahí encontré esa foto de sus viejos visitándome en los platanales de Ciego donde me mandaron por no ir a Angola o mejor dicho por pedir esperar hasta el nacimiento de Samira ....... gajo a gajo cabeza con cabeza va uno formando la baranda de la vida que no es nada recta, da giros, vueltas, lo importante es buscarle el angulo natural a lo que te vas encontrando y no caerte.
martes, 2 de septiembre de 2014
En un Trailer y sin Libreta
Autor: Andrés González
No creo en maldiciones pero hay algunas que por cosas de la vida se cumplen.....A Caraballo iban periódicamente, circos y ferias de caballitos por esos días veíamos caras nuevas que desaparecían junto con la partida de las carpas, los payasos las rumberas los monos los leones famélicos ,el domador y los operarios, Recuerdo las iluminadas estrellas giratorias que nos ponían a la altura del campanario, las sillas voladoras, las casetas metálicas de tiro al blanco y los mareantes carruseles de caballitos de madera.
Ese lunes de septiembre de hace medio siglo, pase con mi maleta de cuero cargada de libros y libretas por el parque rumbo a la escuela primaria "Miguel Mateo" (Centro Escolar), habían desaparecido en la madrugada todos los aparatos del Parque de diversiones ambulante que estaban funcionando en la calle frente a las casas de Risa, Gilla, Sofia Rojas por ahí para abajo casi hasta casa de María Antonia Trasancos, al tomar la calle de la zapatería entre el familiar claveteo de Kike y Manolo Revilla y, el etéreo olor a goma de pegar zuelas, el sonido de las tártaras metálicas y el olor a pan recién horneado, detrás de la panadería apareció ante mi, largo y azul sin ruedas ya, sobre unos polines de linea,como un barco fantasma, o como nave espacial el traile de "Ernesto el caballitero", allí en ese solar vació rodeado de hierbas y montones de basura, no se porque motivo quizá cansado de dar tumbos por toda la isla, quiso quedarse a vivir, Ernesto tenia familia, su mujer Luisa flaca blanca de argollas en las orejas y pulseras y amaneciente rojo creyon de labios, dos hijos Ernestico de mi edad grande y fornido (Luisa no era la madre) y una hembrita de unos 9 meses, que ya se paraba circentemente en la palma de la mano de su padre, Para subsistir Ernesto comenzó a rentar escopetas de perles para cazar, tenia varias y una pistola del mismo tipo, el mismo artesanalmente confeccionada los proyectiles derritiendo plomo , tenia una puntería infalible sin camisa sentado en la escalera de madera que subía a la puerta de entrada del vagón, cigarro en boca, podía darle en la cabeza a un ratón de los que merodeaban su propiedad. Ernestico se hizo mi amigo, fue así que par de veces entré al trailer y vi a cada lado de su estrecho pasillo central la diminuta cocina el fregadero "de juguete" la mesa y camas plegables la ducha y la microscópica taza o retrete, las puertas corredizas, sentí que yo vivía en un palacete (por la amplitud), y es que en Caraballo no estábamos familiarizados con las casas móviles y vivir en ellas nos parecía raro y poco probable, es mas el área se volvió peculiar y diferente, visitable por los curiosos, para ver el trailer de Ernesto el Caballitero y el yate que fabricaba mi primo Rodrigo en su portal del cual ya les conté........ En la vida todos chocamos con imposibles, el imposible de Ernesto el Caballitero para convertirse en residente permanente de Caraballo fue de siete letras. OFICODA, no hubo forma manera palanca que no trato para tener una "Libreta de Abastecimiento" nunca la consiguió no por mala intención de Nania Aguiar su duchisima funcionaria, sino por la burocracia que la guiaba, un día poco antes de desaparecer el trailer del solar de la misma forma en que llego le oí decirle a Luisa maldiciendo, desconcertado y furioso mientras yo jugaba con Ernestico afuera !OJALA QUE MUCHOS AQUÍ EN ESTE PUEBLO TENGAN QUE VIVIR EN UN TRAILER Y SIN LIBRETAAA! .......y se cumplió..
No creo en maldiciones pero hay algunas que por cosas de la vida se cumplen.....A Caraballo iban periódicamente, circos y ferias de caballitos por esos días veíamos caras nuevas que desaparecían junto con la partida de las carpas, los payasos las rumberas los monos los leones famélicos ,el domador y los operarios, Recuerdo las iluminadas estrellas giratorias que nos ponían a la altura del campanario, las sillas voladoras, las casetas metálicas de tiro al blanco y los mareantes carruseles de caballitos de madera.
Ese lunes de septiembre de hace medio siglo, pase con mi maleta de cuero cargada de libros y libretas por el parque rumbo a la escuela primaria "Miguel Mateo" (Centro Escolar), habían desaparecido en la madrugada todos los aparatos del Parque de diversiones ambulante que estaban funcionando en la calle frente a las casas de Risa, Gilla, Sofia Rojas por ahí para abajo casi hasta casa de María Antonia Trasancos, al tomar la calle de la zapatería entre el familiar claveteo de Kike y Manolo Revilla y, el etéreo olor a goma de pegar zuelas, el sonido de las tártaras metálicas y el olor a pan recién horneado, detrás de la panadería apareció ante mi, largo y azul sin ruedas ya, sobre unos polines de linea,como un barco fantasma, o como nave espacial el traile de "Ernesto el caballitero", allí en ese solar vació rodeado de hierbas y montones de basura, no se porque motivo quizá cansado de dar tumbos por toda la isla, quiso quedarse a vivir, Ernesto tenia familia, su mujer Luisa flaca blanca de argollas en las orejas y pulseras y amaneciente rojo creyon de labios, dos hijos Ernestico de mi edad grande y fornido (Luisa no era la madre) y una hembrita de unos 9 meses, que ya se paraba circentemente en la palma de la mano de su padre, Para subsistir Ernesto comenzó a rentar escopetas de perles para cazar, tenia varias y una pistola del mismo tipo, el mismo artesanalmente confeccionada los proyectiles derritiendo plomo , tenia una puntería infalible sin camisa sentado en la escalera de madera que subía a la puerta de entrada del vagón, cigarro en boca, podía darle en la cabeza a un ratón de los que merodeaban su propiedad. Ernestico se hizo mi amigo, fue así que par de veces entré al trailer y vi a cada lado de su estrecho pasillo central la diminuta cocina el fregadero "de juguete" la mesa y camas plegables la ducha y la microscópica taza o retrete, las puertas corredizas, sentí que yo vivía en un palacete (por la amplitud), y es que en Caraballo no estábamos familiarizados con las casas móviles y vivir en ellas nos parecía raro y poco probable, es mas el área se volvió peculiar y diferente, visitable por los curiosos, para ver el trailer de Ernesto el Caballitero y el yate que fabricaba mi primo Rodrigo en su portal del cual ya les conté........ En la vida todos chocamos con imposibles, el imposible de Ernesto el Caballitero para convertirse en residente permanente de Caraballo fue de siete letras. OFICODA, no hubo forma manera palanca que no trato para tener una "Libreta de Abastecimiento" nunca la consiguió no por mala intención de Nania Aguiar su duchisima funcionaria, sino por la burocracia que la guiaba, un día poco antes de desaparecer el trailer del solar de la misma forma en que llego le oí decirle a Luisa maldiciendo, desconcertado y furioso mientras yo jugaba con Ernestico afuera !OJALA QUE MUCHOS AQUÍ EN ESTE PUEBLO TENGAN QUE VIVIR EN UN TRAILER Y SIN LIBRETAAA! .......y se cumplió..
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