lunes, 17 de agosto de 2015

Volverán los chicles a Caraballo

Autor: Andrés González


Los chicles o la goma de mascar, invención y símbolo del "Enemigo del Norte" desaparecieron de arriba de la nevera del Bar de Aparicio a principios de los sesentas, no se escabulleron solos, como por arte de magia y poco a poco los siguieron el pomo de cristal y tapa de rosca de la amarillenta mantequilla, los bombones de licor, los tibios pastelitos de guayaba, los refrescantes batidos de trigo, la burbujeante botella del refresco Materva y un largo etc etc. Aprendimos a vivir sin el chicle, fueron aclarándose de su adherida y pecosa apariencia los pisos de los portales de los bares y las aceras del pueblo; los buscamos subconcientemente, masticando cualquier cosa, un hilo de la camisa un pedazo de cámara de bicicleta, el pellejo de la fruta del caimitillo, eran difíciles de olvidar, su sabor, su olor. Unos los de hacer globos, rosados como goma de borrar y, sus envolturas de subtituladas postalitas en inglés y otros en cajitas amarillas con ventanillas de celofán por donde asomaban su nacarada, blanca y cuadrada figura. Es que es tan difícil a veces deshacerte de ellos, escupirlos aunque tus quijadas estén adoloridas y a punto de desfallecer. 
Trabajando en el hospital de Santa Cruz del Norte en los ochentas una abuelita serrana me trajo a su nieto al Cuerpo de Guardia, me pareció al mirarlo que tenía Paperas, inseguro y desconfiado de mi diagnóstico le pregunté "Cuando regresaste Hortencia de tu visita a Estados Unidos?" me contestó "ANTIEERR"... Ay el chicle!
Siempre amenazando a nuestra juventud y al hombre nuevo,( a mi) nuestra integridad, y cambiando la configuración de nuestro macizo facial. Nosotros en Caraballo, lo recordábamos con ambigüedad y confusos sentimientos en los sesentas en el parque, salvados por la ausencia de visitas de emigrados y traidores a la patria que no regresarían JAMÁS!! confortados por la lírica antimperialista de un cantante argentino que se mofaba en la letra de una canción y a teatro lleno entonando "DE MANDÍBULAS GRANDES DE TANTO MASCAR CHICLES ES MUY COMÚN EL VER A LOS AMERICAAANOS..." creo que antes de morir hizo giras artísticas por acá por el interior Del Monstruo y no sé si la canto aquí......
Solo una vez una sola y única vez, en aquella larga ausencia reapareció el Chicle en Caraballo brevemente, la noticia de su llegada se corrió por todo el pueblo, curiosos corrimos al reencuentro, esta vez ,lo vimos expuesto debajo del cristal de la ex farmacia del Doctor Lario, en la cola, para comprarlo, lo adoramos como los reyes magos al Niño Dios en su pesebre, pues es cierto que nada se anhela más en la vida que lo prohibido, no importó que el farmacéutico Orlando Padrón nos advirtiera "Que no eran los mismos chicles" y luego se retirara a la parte posterior de la farmacia con una sonrisa en sus labios. NO, para nosotros eran chicles, Y HABÍAN VUELTO!, esa noche en el parque hasta altas horas de la noche, los masticamos con vehemencia, oímos música americana en un radio de baterías, decidimos no escuchar al joven Silvio Rodríguez cantando FUSIL CONTRA FUSIL o al negrito Harry Lewis con su rítmica "pangola pangola vamos a sembrar pangooolaaa" al otro día cagamos mucho mucho, mucho y muchas muchas veces,.......
Recientemente el viejo Silvio anduvo desarmado, esta vez, por Washington DC, Mister Kerry con sus mandíbulas grandes anduvo la Habana con Eusebio. Tenemos otro negrito que nos canta..." drume drume nengritooo que tu mama está en el campo sembrando pangola todavía" y hasta otro argentino con voz, ayudando desde Roma. Parece que volverán los chicles a CARABALLO, atentos a donde nos lo van a vender, si en la farmacia o en el bar, no vaya a ser que nos caguemos de nuevo..

domingo, 9 de agosto de 2015

Control y Ayuda - Manuel Mesa el hombre del Saco de Yute

Autor: Andrés González

El evento paralelo que acostumbro a hacer por acá arriba con los Caraballenses ha sido esta vez tan escaso de público que prefiero considerarlo una visita de CONTROL Y AYUDA, Contando a Boby el guardián de las Calabazas, solo 5 asistentes, Ausentes esta vez entre otros, Rey Rojas y Mabel, Norma Rolo (me cambiaron por un Baby Shower).
En si solo la valiente María Rivero y su jibacoense esposo, asistente y chofer particular Tony Quintana, participaron del potaje de garbanzos. En la plenaria se consideraron bajo la dinámica y circunstancias actuales que no podemos seguir culpando a los venados por la destrucción de las hojas de Calabaza pues en días recientes se avisto a una marmota meteoróloga dándose un pase de ellas.
LOS COMPAÑEROS visitantes SUGIRIERON 1) Liberar a el Camarada Boby de sus funciones como vigilante de patio y su regreso a Caraballo para reincorporarse a las guardias en la casa de las milicias de la Calle de la Linea.2) Hacer del revés una victoria y promover el uso ecológico de los remanentes ahuecados y tubulares pitos de calabaza como absorbentes de bebidas , juguetes "adicionales" como cerbatanas infantiles (cultivo de peonias y entrenamiento de soplado para los chamas incluido), sopladores de agua espumosa en jarros de aluminio con detergente para pompas y globitos, además su posible aplicación en el Campo de la Medicina Natural como vía introductoria para lavados y enemas.3)Que los organizadores del evento debemos hacer un mayor esfuerzo y cambiar de marca de cerveza que pudiera ser una de las causas de la decreciente participacion.4)Iniciar un incendio o fuego forestal previo al comienzo de actividad para que los asistentes puedan por la columna de humo ubicar la dirección......
Le preguntamos a esta ilustre visitante por qué sin temor se aproximó a Boby a expresarle su inquebrantable solidaridad a sabiendas de que la Marmota residía exactamente debajo de nuestro aguerrido guardián, nos contestó, como solo podíamos esperar de una heroica representante de la mujer Caraballense....."Nunca he sentido miedo de nada ni de nadie, ni cuando chiquita, recalcooo de nada ni de nadie INCLUYENDO a Manuel Mesa y su saco de yute"........
Nota aclaratoria: Manuel Mesa fue un Caraballese real, terror de todos los niños inapetentes y malcriados, gozaba su papel al máximo, rondaba el pueblo con un saco de yute y una soga, presto, lo abría en los portales y con ojos de loco se abalanzaba a las salas y comedores ante los aterrados infantes y el beneplácito paternal fingía estar listo para llevárselos a cuesta si no comían o seguían jodiendo (otro ejemplo de control y ayuda).... 

PD Boby dice que tumben esa, que él no vira....


domingo, 2 de agosto de 2015

El viaje a la Meca Caraballense (Las fiestas de Caraballo en Miami)

Autor: Andrés González

Pues sí, para desquitarme de tanto pasado pedal en bicicleta me dispare el viaje de Nueva Jersey a Miami en carro, solo podrán entenderme quienes jadearon detrás de un manubrio o colgaron bamboleándose de un tubo de una ruta 49, el porque me es placentero sentarme por tantas horas detrás de mi timón, bajarme a orinar y echar gasolina con la frecuencia que me exija mi vejiga y la aguja del tanque.
Espere mucho tiempo y quería juntarlo todo, ver gente de mi pueblo, vecinos, amigos, timbres de voces, oír de mis coterráneos buenas y malas noticias, lo hice, realice visitas cortas, y ciertamente vi a muchos pero no a todos, nunca se consigue en la vida el 100 % de lo que uno aspira a tener o a hacer.
En el encuentro de los caraballenses el Domingo 26 de Julio al llegar cuando empecé a abrazar gente, suerte que tenía gafas puestas porque se me humedecieron los ojos cuando vi a Romelio el hijo de Epifanía y me dije "COÑO QUE ESTO NO ES UN VELORIO Caraballense!!!" además yo nunca en Caraballo derrame una lagrima por Romelio, así que me compuse y al abrazar a Roberto Revilla me acorde que para ser un Velorio Caraballense al primero que me hubiese encontrado no habría sido ni a Romelio ni a Roberto sino a Pincho su hermano. Sin pudor, y combinando memoria, y genealogía, me ubique ante cada rostro y pregunte inquisitivo "Y tu quien eres" difícil a veces desplazar arrugas, poner cabello, y hacer lipos mentalmente en fracciones de segundo, pero lo conseguí. Embarazoso fue acercarme a el grupo de muchachones con pectorales inflados y moyeros, como un caza talentos para novelas mejicanas, mirarle a los ojos (AZUL ACUA) a uno de ellos, tratando de ser yo, lo más varonil posible en una situación como esta y preguntarle "TU ERES FAMILIA DE ZOILITA CAPOTE" biiingooo !!....Buen rato allí en el Parque Amelia, me dicen que antes eran más concurridas estas reuniones, para mi tarde pero creo que como los musulmanes en su peregrinaje a la Meca los caraballenses tenemos que ir aunque sea una sola vez, que gusto oír de la boca de Ichi Perez que jugo pelota con mi padre. ... De ahí salí a encontrarme con un viejo amigo, me conto algo personal de cuando vivía en Güines como estamos en la misma provincia por el momento se los comparto....
La ilusión de Orestes era comerse un pollo entero de aquellos que importaban de Brasil y que el hacha inmisericorde del carnicero después de marcar en su libreta de abastecimiento mutilaba en amorfa e irreconocible porción. Un día le propuso un trato al carnicero le dijo "Voy a esperar varias cuotas personales sin que me lo de y cuando Usted crea que llegue al pollo entero entonces me lo vendes....así fue, esperooo y esperoooo, hasta un día que el carnicero le dijo detrás del mostrador "ya tienes el pollo entero", lo saco delante de su cara resplandeciente de felicidad inicialmente y estupefacto después vio como lo puso sobre la madera y de un certero hachazo le cerceno un ala,.......
No los vi a todos, imposible, hubiese sido maravilloso, era,mi deseo mas caraballense, hubiese sido UN POLLO ENTERO pero, nada se consigue al 100%.......
PD Orestes solo come en Miiami pechuga.